PREMIOS INTERNACIONALES
17 BY PINEA















Enfocamos nuestros esfuerzos en dar valor a los trabajos hechos con paciencia y a la atención al detalle, y “17” es el resultado de esta combinación. Un vino que recibe el nombre de un año de importantes acontecimientos para nuestra bodega, incluido el debut comercial de nuestro buque insignia PINEA.
La mejor versión de la uva tempranillo está en nuestra tierra y este vino refleja todo el potencial de esta variedad.

’17 by Pinea’ es un vino de color vibrante, limpio y de intensidad media. Un vino con cuerpo en el que se mezclan en perfecto equilibrio la fruta y los tostados de la madera, lo que le aporta frescura y a la vez estructura e intensidad.
Un tinto 100% tempranillo, atrevido, elegante y con un final largo y persistente.
2019
Un año cálido con poca variación climática dio lugar a una fruta muy sana. Los días más frescos de la vendimia nos permitieron controlar mejor la temperatura de la uva entrante antes de la fermentación. Las uvas se seleccionaron y recogieron a mano en cajas de 14 kg en el viñedo. Una vez en la bodega, realizamos una segunda selección de uvas, quedándonos sólo con los mejores racimos.


2018
Los primeros brotes de la añada 2018 llegaron un poco más tarde de lo normal. Un año antes habíamos vivido una de las mayores heladas que se recuerdan en Ribera del Duero, lo que nos obligó en el inicio de 2018 a doblar trabajos en nuestros majuelos cuando la planta revive y comienza su ciclo, atendiendo con sumo cuidado la formación de brazos.
Aromas frutales desde el primer contacto, tonos frescos y alegres con un fino hilo conductor de vainilla y bayas de bosque, algo maduras. Sutil al primer contacto, expresivo y alegre.
2017
El episodio climatológico más destacado fue la helada que se produjo en toda la región durante la primavera, en concreto en abril. Esta circunstancia complicó los trabajos de campo durante el verano y la gestión de la vegetación, pero pese a las complicaciones climáticas, los volúmenes y cantidades fueron los adecuados y la uva entró con un índice altísimo de calidad. Los rendimientos fueron menores que en otras añadas, lo que concentró el potencial y la calidad de la uva cosechada.
Un vino de intensidad alta con aromas abundantes y perfumados.


2015
Los primeros brotes de la añada 2018 llegaron un poco más tarde de lo normal. Un año antes habíamos vivido una de las mayores heladas que se recuerdan en Ribera del Duero, lo que nos obligó en el inicio de 2018 a doblar trabajos en nuestros majuelos cuando la planta revive y comienza su ciclo, atendiendo con sumo cuidado la formación de brazos.
Aromas frutales desde el primer contacto, tonos frescos y alegres con un fino hilo conductor de vainilla y bayas de bosque, algo maduras. Sutil al primer contacto, expresivo y alegre.